"Había sido enviada junto a dos escritores por un periódico local a fotografiar a un fenómeno de la guitarra que estaba por convertirse en la mano derecha de David Bowie y dejar Oak Cliif para mejor. Este pequeño y humilde texano se paró frente a mí con su desvencijada Strato y sus hermosas y enormes manos y soltó una ráfaga de notas y acordes que voló alrededor de nosotros y nos envolvíó de una.....incredulidad acaso?. Era la segunda venida de Hendrix, Muddy Waters.... algo tan único que resulta incomparable. Y era sólo una prueba de sonido, estaba tocando para nosotros, para sus compañeros de banda, Whipper y Tommy, para su amigo Cutter, para él mismo, estaba tocando porque no podía frenar la necesidad absoluta de expresar esos sonidos de su corazón, de su alma.
Yo estaba en el cielo: soñaba alguna vez con capturar Hendrix pero fuí varios años tímida de ese objetivo. Aquí estaba un hombre que me hizo olvidar que no pude ser Jim Marshall, que a mi Leica se le había negado la posibilidad de retratar la inmortalidad. Este hombre rellenaba el cuadro de 35mm con un talento gigantesco. El deseo de elevar mi fotografía y mi fluidez con mi cámara y estar a la altura de la situación era casi insoportable. Fue el punto de inflexión en mi trabajo -cuando todo se vuelve claro, nítido e intuitivo a la vez- y eso sucedió gracias a Steve Ray Vaughan.
Había "algo" en él, su forma de tocar, la forma en que se dió, que hizo esto posible para mí,.... través de este maravilloso regalo y la grandeza de su espíritu, aún hoy lo escucho. Y fuimos testigos de todo esto en sólo una prueba de sonido?...."
Tracy Hart fotografío a SRV desde desde 1983 hasta 1990.
0 comentarios:
Publicar un comentario