Muchos se preguntan ¿cómo una persona ciega se puede manejar sin problemas por un barco de vela, donde en cada paso hay un obstáculo? Sinto Bestard conoce perfectamente el barco y puede controlar los pequeños problemas que pueden surgir. —Oigo el ruido del viento y su influencia sobre las velas y las cuerdas del barco, manifestaba el aventurero. Tiene desarrollados los otros cuatro sentidos, sobre todo el oído. Dentro del barco se encuentra perfectamente, como pez en el agua, y no encuentra barreras que le impidan desarrollarse como navegante. Es precisamente en tierra cuando no está a gusto.
Él vive el mar como nadie y en tierra no se encuentra a gusto. Sentados en proa, decía que estando en medio de un océano, uno se hace una composición de lugar y disfruta perfectamente de la puesta del sol, de la brisa marina y muchas cosas más. Estoy en plena naturaleza y es una sensación maravillosa.
Esta es una serie de la fotógrafa Laia Abril :